Merece ganar el Olimpia y el Premio Clarín

Este es: Germán Lauro, el mejor atleta de la historia de mi querida Trenque Lauquen, ciudad a la que llegué en el año 1969, desde Pellegrini, a escasos 50 kilómetros.
Hoy estará entre los ternados para el Olimpia. El jueves, entre los ternados de Clarín.
Se merece ganarlo.
Su actuación en los Juegos Olímpicos de Londres, fue descollante. 
Toda una comunidad lo recibió, cuando regresó de aquellas tierras, en un hecho inédito, máxime tratándose de un deporte que bien podría calificarse como "no tradicional" o generador de "marketing".
Vuelvo al blog, después de mucho tiempo sin hacerlo.
Publicaré lo que escribí en mi cuenta de Facebook, red donde no hago referencia a cuestiones políticas.
Germán Lauro, todavía un pibe, le dio a Trenque Lauquen una de las grandes satisfacciones deportivas de su más que centenaria vida.
En los últimos Juegos Olímpícos, en lanzamiento de bala se ubicó en el sexto lugar. Su actuación fue ponderada por todos los que tuvieron oportunidad de verlo, no solo en Argentina, sino en el mundo entero.

Por estas horas, ya logró la clasificación para el Mundial que se desarrollará en Rusia, en agosto del año próximo. El sábado superó holgadamente los 20 metros en la provincia de Santa Fe y otro pasaporte internacional más.

Está ternado para los Olimpia y los Premios Clarín. Más que merecido tiene que se le otorgue, pero esas cosas no las definimos quienes lo conocemos, y vivimos emocionadamente desde la Pampa Húmeda Bonaerense, su participación en los juegos ecuménicos, como su triunfal regreso.

Lo que si podemos afirmar, sin eufemismos, que en Trenque Lauquen ganó varios premios a saber, que no son estatuillas, sino que se abrojan en ese misterioso, pero trascendente lugar: el Alma.
- HONRADEZ.
- DEDICACIÓN.
- SACRIFICIO.
- HUMILDAD.
- SIMPLEZA.
- VOCACIÓN.
- RESPUESTA POPULAR.
- EMOCIÓN.
Ojalá, sea un gran martes para Germán Lauro, que en la noche del lunes, agasajó con un asado hecho por él, su hermano y unos amigos, a colaboradores y periodistas de esta ciudad que lo tiene como uno de sus hijos pródigos.