El mejor periodista de investigación de los últimos años en la Argentina, Horacio Verbitsky, tuvo la generosidad de mencionar este blog en el sesudo informe que publica en Página 12 del domingo.En principio lo agradezco.
Me une al reconocido profesional, respeto y admiración, más que amistad.
Al hacer referencia al armado opositor al Gobierno Nacional con la mirada puesta en las elecciones del 2009, Verbitsky se referencia en un artículo firmado por el autor de este post, en torno al “Proyecto de Político” que encarna Jorge Srodek de la mano de Francisco De Narváez, Felipe Solá y Mauricio Macri.
Deseo transmitir otra muestra de gratitud al colega por indicar que “FUE” Jefe de Prensa del ex secretario de Agricultura, ahora candidato en segundo lugar por Unión-Pro para las legislativas de Junio.
Es válida la apreciación remarcada, ya que la política suele dejar “estigmas”.
Se constituyen en complicadas para aventar, pese a los esfuerzos denodados que puedan hacerse para alcanzarlo..
No me une, ni unirá a Solá, relación alguna.
Jamás renegaré de los 15 años con que colaboré con él, porque soy agradecido.
Me hago cargo si equivoqué el camino, cuando trabajé con entusiasmo, fuerza y ganas para construir un proyecto político que nos excediera, pero estoy “harto” de vivir respondiendo a amigos, conocidos y extraños que no tengo ni las más pálida y remota idea de sus procederes ó ambiciones.
Hay desvinculaciones sin retorno.
Cuando leí el amplio artículo publicado con la firma de Horacio Verbitsky - después de haber recibido decenas de llamados telefónicos desde distintos puntos del país y el exterior - y comprobé que había incorporado la mención en tiempo pasado con: “FUE”, sonó un “canto para oídos y espíritu” y hubo "alegría".
No soy militante de la política.
Creo, modestamente, ser militante de la vida amante de la Democracia.
Trato de desenvolverme, sin entregar principios y convicciones.
Es por ello, que cuando abrazo una causa ó convocan a trabajar, primero evalúo calidad humana, trayectorias, reconocimientos y modos.
Las cualidades precitadas permitirán sostener - aunque tenga que tropezar muchas veces - el viejo refrán:
“Se dobla, pero no se quiebra”.
Será el mejor legado que dejaré a los que quiero y por los que trabajo todos los días.
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